El cuerpo humano está compuesto por un 75% de agua. Se estima que un adulto de peso medio precisa unos 2 litros diarios. Aunque la cantidad concreta depende de distintos factores como pueden ser el sexo, el peso, los niveles de sudoración etc., nuestro organismo necesita recuperarlos diariamente.
Una forma de recuperar los niveles de agua e incorporar hábitos saludables es el consumo de zumos de frutas naturales.
Al contrario de los zumos de frutas concentrados que podemos encontrar en los lineales de los supermercados, los zumos de frutas naturales contienen todas las propiedades de la fruta y no contienen azúcares añadidos.
Todos los cítricos, en especial el limón, la naranja y el kiwi contienen grandes cantidades de Vitamina C.
Una forma sencilla de incorporar esas vitaminas es mediante el consumo de zumos, puesto que, gracias a que se consumen sin cocinar se mantienen inalterados todos los nutrientes de la fruta.
La vitamina C, por ejemplo, ayuda a aliviar los episodios gripales puesto que facilita la absorción de los minerales y tiene un papel fundamental en la formación de colágeno (disminuye el dolor y la inflamación).